viernes, 16 de junio de 2017

Autor: Jorge Isaacs  (1837-1895)
Genero y corriente: Novela, Narrativo, Romanticismo
Estructura: La novela se divide en 65 capítulos que permite desarrollar con total orden y precisión de los hechos
Personajes: Efrain, Maria, El padre, La madre, Emma.
Sinopsis: La historia trata del amor entre María y Efraín. María era prima de Efraín. Y viva con su familia de el porque sus papas murieron desde que ella era pequeña y el papá de Efraín le había dicho al papá de María que se iba a quedar con ella y que la iba a educar junto con sus hijos y que también la iba a convertir en cristiana, porque la familia de María era judia. Desde adolescentes ya empezaban a sentir algo pero ellos todavía no lo sabian bien. Efraín se tuvo que ir a estudiar fuera, asi que se separaron, pero cunado regreso se dieron cuanta de que su amor era muy grande. Ellos vivieron muchos momentos muy felices y ya hasta los papas de Efraín ya sabian del amor que se tenian. Un dia María se puso muy mal, y era porque habia heredado la enfermedad de su madre, la Epilepsia. Efraín se puso muy triste

Maria empezó a presentar síntomas de la misma enfermedad que hizo fallecer a su madre muy joven, epilepsia; así que los padres de Efraín al darse cuenta del sufrimiento de su hijo por María hablan con él y le comentan todo los riesgos de la enfermedad de María y del sufrimiento que les esperaría a ambos jóvenes, pero su padre le dice que si después de irse a estudiar 5 años a Europa regresa y sigue enamorado de ella, dará su consentimiento a que se casen. Ambos se separan, en la ausencia de Efraín, Maria empeora de salud hasta fallecer, en su agonía pide ver a Efraín, así que este viaja desde Londres hasta Cauca para verla. María guarda sus trenzas y las cartas de Efraín y las da a Emma a entregárselas, al volver Efraín y ver que María había fallecido y al darse cuenta que en balde fue su viaje, permanece unos meses en la casa, recorriendo todos los lugares que fueron testigos de su amor y reviviendo esos momentos inolvidables, al no resistir tanta tristeza prefirió alejarse del bello huerta y la casa en que había pasado su niñez.
Opinión:

Esta obra de Jorge Isaacs, se encuentra descrita en la America colonial, es una novela romantica en donde se habla del amor entre dos jovenes enamorados, Maria y Efrain.
Como en la mayoria de las novelas de esa epoca, los terminos son por demas exaltados, cargados de amor y dulzura.
Maria una joven huerfana que es recogida en el seno de sus tios, se enamora desde muy tierna edad del que es su primo Efrain, esto es visto con agrado por parte de la familia, pero el padre pone condiciones como que el hijo termine sus estudios de medicina. Maria a su vez habia heredado de su madre una terrible enfermedad, para esa epoca, la epilepsia y cuando se vieron obligados a separarse el mal hizo grandes estragos en ella,cusandole la muerte.
El sufrimiento de Efrain es descrito con gran emocion, el consuelo no es algo que pueda esperarse sino mas bien el interminable tormento.
Como decia cada epoca tiene sus caracteristicas, en la actualidad las mujeres son menos ”recatadas”, ya ninguna se averguenza de ser vista con los pies desnudos ,por ejemplo, el tipo de vestidos, peinados, etc. Tambien marcan una diferencia de gustos en cada periodo de tiempo.
Si analizamos por otro lado la intervencion de los padres de Efrain, en nuestros dias es muy poco probable que estos decidan donde, cuando y que estudiar, ya que los jovenes de ahora somos mas independientes y ya la mujer no tiene que quedarse en casa esperando al marido prometido sino que las mujeres formamos parte del fenomeno economico de cada pais.
Respecto a la enfermedad de Maria, ya la epilepsia no es el mounstruo de entonces, se sabe que es un transtorno de conexiones nerviosas que puede ser controlado con medicamentos sin ser la causa de una muerte.
Como diriamos entonces “de amor ya no se muere”, las desiluciones amorosas se repetiran indifiniblemente, pero no pasaran de ser depresiones pasajeras que solo podrian ocasionar la muerte de personas con graves desordenes de personalidad.
Esta es una novela romantica, emotiva, familiar pero que ya no describe el sentir actual aunque los sentimientos puedan seguir siendo tiernos o apasionados la rapides de la vida de ahora no nos da mucho tiempo para ahogarnos en rios de romanticismos.
La bella descripsion de los hermosos paisajes narurales en donde se sude la historia es otra de las caracteristicas de esta novela, y lo hace con tal proligidad qu podriamos trasladarnos al lugar de los hechos con solo cerrar los ojos.
En conclusion una linda historia de amor pero del amor de aquellos tiempos.
Tabare

Autor: Juan Zorrilla de San Martín, poeta, periodista, diplomático y político uruguayo; 1855-1931.
Género y corriente: Poema narrativo romántico.
Estructura: Está compuesto por una introducción y tres libros que, a su vez, se dividen en: dos cantos, el primero, y seis cantos cada uno de los segundo y tercero.
Personajes:
Sinopsis: Magdalena, una bella española, es abandonada durante un ataque de los indios a los primeros conquistadores desembarcados en tierra uruguaya. El cacique charrúa Caracé la toma como mujer y tienen un hijo de tez clara y ojos azules a quien Magdalena bautiza con el nombre de Tabaré y durante su niñez le infunde la religión cristiana. Pero la madre, llena de tristeza y soledad en medio de aquellos salvajes, muere dejando muy pequeño a su vástago.
Pasa el tiempo y al cabo de muchos años nuevos conquistadores españoles establecen un villorrio junto al río San Salvador.
Entre hispanos y charrúas se desencadena una guerra que lentamente va acabando con los indios. La tribu agoniza, ya han muerto sus mejores caciques: Zapicán, Abayubá, Añagualpo, Yandinoca, Tabobá, Magaluna, Yací, Teyú y otros igualmente valientes.
Don Gonzalo de Orgaz, jefe de la plaza española, trajo consigo a su esposa, doña Luz, y a su hermana Blanca
"esa otra niña de tez morena,
la hermosa, la inocente Blanca,"
de ojos negros y profundos
"en que la luz del sol de Andalucía
brillo de estrellas, presta a las miradas."
Cierto día, sale del villorrio un grupo de españoles en plan de atacar a los charrúas y regresa con muchos prisioneros, entre éstos se destaca uno menos moreno y con ojos azules; además, toda su actitud lo diferencia profundamente de los demás cautivos. Parece triste o enfermo, más aún cuando conoce a Blanca. Al verla, sin distinguirla bien del recuerdo borroso que conserva de su madre, se enamora de ella.
Tabaré se resiste a sus sentimientos. Lucha entre el odio de su raza, enemiga de los españoles, y la adoración a Blanca. La joven, cuando lo ve, siente afecto por aquel mestizo. Le tiene compasión, se conduele de él e intercede para que su hermano lo deje libre y no lo encadene. A los ruegos de Blanca se unen las palabras del padre Esteban, quien sirve de intermediario para defender al joven. No así doña Luz, para quien
"esos salvajes, hombres no son;
no tienen alma; no son hijos de Adán;
esta estirpe feroz no es raza humana."
Tabaré pasa por loco ante los soldados. No habla, huye de todos, no duerme, vaga por la noche y a veces, en vela a muy altas horas, le han visto detenerse frente a la ventana de Blanca.
En una ocasión lo sorprenden y persiguen creyéndolo un fantasma. Acosado y sin armas, el indio se defiende desesperadamente. Ya está por caer cuando el padre Esteban llega y detiene a la soldadesca.
Al día siguiente, don Gonzalo, quien no quiere violar la amistad pactada con el mestizo, aunque ahora se le hace sospechoso por sus velas y rondas nocturnas, lo expulsa del villorrio devolviéndole su libertad, pero con prohibición de acercarse al pueblo.
Los charrúas, mandados por el nuevo cacique Yamandú, una noche atacan sorpresivamente a la colonia española. El jefe indio quiere apoderarse de Blanca y por eso ha lanzado el malón sobre el villorrio, pues un día la muchacha se internó demasiado en el bosque y fue vista por el cacique, despertando en éste el deseo por la joven.
Yarnandú, durante el ataque al villorrio, encuentra a Blanca, la rapta y se la lleva al fondo de los bosques, donde espera hasta que ella se recobra del desmayo.
Al volver en sí, Blanca grita y se crispa de miedo cuando ve al cacique mirándola con lascivia. A sus espaldas, oye crujir las ramas y pasos que avanzan. De pronto dos rugidos. El choque de dos cuerpos luchando que se desploman. Un grito ahogado y, por Fin, el silencio. Es Tabaré que oyó a lo lejos el grito de Blanca y corrió en su busca; peleó contra Yamandú estrangulándolo, pero ella lo ignora, pues no ha mirado hacia atrás, no vio la lucha y, por lo tanto, desconoce el desenlace; ni siquiera adivina quién fue su defensor.

Al verse sola, la joven de nuevo siente miedo y gime. Tabaré acude en su ayuda. La calma con sus palabras, y con cuidado y ternura la conduce en sus brazos hasta el fortín español. Don Gonzalo, fuera de sí por la desaparición de Blanca, ve venir al mestizo con ella, corre hacia él y, creyéndolo el raptor, lo mata atravesándole el pecho con su espada.
Genero; Épico-lírico. El poeta canta la epopeya de una raza —encarnada en Tabaré— en su ocaso, en su agonía. Pero, a la vez, la historia de esa raza está expresada líricamente; de allí que el género de la obra sea épico-lírico. Algunas escenas en que aparecen diálogos entre los personajes, junto con la descripción del marco esceno­gráfico, acercan la composición al género dramático, ya que serían de fácil represen­tación.
Con estas palabras termina el poema.
De esta obra es preciso destacar cuatro puntos:
1. El hilo narrativo es romántico en su concepción, desarrollo y desenlace.
 2. El escenario, la naturaleza agreste del Uruguay con sus selvas, ríos, fauna y flora, está muy bien descrito.
3. El aspecto costumbrista es soberbio en las descripciones del ambiente guerrero de los charrúas.
 4. El fondo teológico, desde el cual el autor expone sus ideas religiosas y la pugna ideológica y espiritual entre indígenas y españoles, es excelente.

Sin embargo, más allá de toda ambientación típicamente americana y de la grandilocuencia propia de la época en que fue escrito (1886), el máximo valor literario de Tabaré radica en su contenido universal.

Martin Fierro

Autor: José Hernández, poeta y ensayista; 1834-1886.
Género y corriente: Poema épico gauchesco.
Estructura: Consta de dos partes; la primera, El gaucho Martín Fierro (1872), compuesta por 13 cantos, y la segunda, La vuelta de Martín Fierro (1879), por 33.
Personajes:
Sinopsis: El gaucho y payador Martín Fierro, rodeado de curiosos, cuenta sus desventuras en una pulpería, haciendo una evocación de la época en que vivía contento y seguro en su rancho, sabiéndose esposo y padre, con un trabajo placentero y el orgullo de ser libre. Pero lo detienen y enganchan para el servicio militar en los cuarteles de la frontera, junto con otros de su misma condición.
Luego de tres años de maltratos, trabajo duro, guerras contra los indios, sufrimientos y privaciones, sin recibir paga alguna, Martín Fierro, huyó a su rancho: desertor, pobre y desnudo a procurar suerte nueva. Pero al llegar: no hallé ni rastro del rancho/ ¡sólo estaba la tapera!/ [...] sólo se oían los aullidos/ de un gato que se salvó.
Tampoco estaban allí su mujer y sus hijos. Más tarde supo que las autoridades los despojaron de todo y cada quien se marchó por distinto rumbo.
Transido de pena y perseguido por desertor, Martín Fierro jura vengarse y se hace gaucho malo. Vaga por la pampa y frecuenta las pulperías. Un día, estando ebrio, mata a un negro a quien había provocado. Huye del lugar y se refugia en el campo. Hasta allí lo persigue la policía y lo acorrala. Pero él no se arredra y enfrenta a los milicos. El sargento Cruz, miembro de la partida perseguidora, admi­rando el valor de Fierro, se pone de su lado y entre los dos derrotan y ahuyentan a los perseguidores; luego, se marchan para guarecerse en territorio indio, a pesar del riesgo que ello implicaba. Martín Fierro encuentra en el gaucho Cruz —quien le cuenta su historia— un amigo leal y valeroso que ya enfrentó los abusos de las autoridades. Con este pasaje termina la primera parte de la obra.
En La vuelta de Martín Fierro, el gaucho payador relata cómo él y Cruz, luego de atravesar el desierto, llegaron a territorio de indígenas. Allí fueron hechos prisioneros y durante cinco años llevaron una vida de penurias junto a los indios.
Las costumbres salvajes de éstos empavorecieron a los dos gau­chos. Martín Fierro también describe los bailes, fiestas y malones de los indios. Más tarde, Cruz muere a causa de una epidemia de viruela entre los nativos.
Finalmente, el payador logra huir después de dar muerte a un indio que se complacía en azotar a una cautiva blanca. Con ella llega a tierras cristianas, se despiden y él regresa a la frontera.
En una estancia hay fiesta y el gaucho participa en ella. Como de costumbre, canta sus desgracias. Sus dos hijos ahí presentes, han escuchado el relato, se le acercan y en emotivas estrofas narran sus vidas a partir de cuando él fue obligado a marcharse del hogar. El mayor de ellos estuvo injustamente en la cárcel, y el menor fue estafado por su propio tutor, el viejo Vizcacha, y por el juez que conocía su causa.
Luego aparece Picardía, un nuevo personaje, hijo del sargento Cruz. El también, por instigaciones de un individuo al servicio de un juez corrupto, fue enrolado en el ejército para pelear en la frontera.
En la misma reunión hay un negro cantor que comienza a increpar a Martín Fierro. Es el hermano del hombre que antes había matado. Ambos se traban en ingenioso diálogo cantado y demuestran tener conocimientos e inteligencia suficientes. El negro quiere vengar a su hermano, pero la concurrencia evita la pelea y Martín Fierro se marcha con sus hijos.

Sin embargo, la pobreza les impide permanecer juntos y deben separarse-, pero, antes de hacerlo, Martín Fierro aconseja paternalmente a sus hijos y a Picardía, diciéndoles: es mejor que aprender mucho/ el aprender cosas buenas.
El gaucho les habla de la amistad, la lealtad y la prudencia. Luego se despiden con gran emoción y cambian sus nombres para no ser reconocidos.
A estas alturas interviene el autor, convertido ahora en narrador, prometiendo nuevas obras sobre los gauchos, y pronostica que, después de su muerte, los gauchos habrán de recordarlo. Sueña con un mundo en el cual se reconozcan todos sus derechos a los hombres de la pampa y termina afirmando: "Y si canto de este modo, por encontrarlo oportuno, no es para mal de ninguno sino para bien de todos."

Este poema tiene la virtud de reflejar la vida gauchesca, tanto en su aspecto social como en el psicológico. La figura casi mítica del gaucho argentino cobra vida en las páginas de Martín Fierro, y su protagonista es la encarnación del individualismo, la libertad y la sabiduría popular.

En mi opinión;
El gaucho Martin Fierro, un gaucho trabajador de las pampas bonaerenses, es reclutado forzosamente para servir en un fortín e integrar las milicias que luchan defendiendo la frontera argentina contra los indígenas, Su vida de pobreza es algo muy frecuente en la literatura de la       época romantizada. Al volver, su rancho se encuentra abandonado y su mujer y sus hijos se han perdido. Después, desesperado, Martín Fierro mata a un hombre negro en un duelo, lo que lo lleva a convertirse en gaucho matrero fugitivo perseguido por la policía. Enfrentándose en batalla contra ellos, consigue un compañero, el sargento Cruz, que inspirado por la valentía de Fierro, se une a él en medio de un combate. Y finalmente huyendo, ambos se ponen en camino al desierto para vivir entre los indios, esperando encontrar allí una vida mejor. Así, concluyendo que es mejor vivir con los salvajes que lo que la 'civilización' les deparaba, termina la primera parte publicada en 1872 con el título El gaucho Martín Fierro. Al describir la figura del matrero desertor, José Hernández se propuso denunciar los abusos de la sociedad de su época, pero su Martín Fierro trascendió esa meta inicial para devenir un hito fundamental e imperecedero de las letras argentinas”
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Autor: Domingo Faustino Sarmiento, escritor, educador, político y periodista; 1811-1888.
Género y corriente: Novela biográfica romántica, con algo de ensayo histórico, sociológico y político.
Resultado de imagen para domingo faustino sarmientoEstructura: Consta de una introducción y de tres partes nominadas divididas en cuatro, nueve y dos capítulos, respectivamente.Sinopsis: Facundo es el representante de la barbarie. Nace y se desarrolla en el ambiente físico definidos de hábitos y caracteres de los tipos que el mismo entorno engendra, sobre los cuales pesan la historia y la tradición.Personajes: Facundo, Rosas.En la primera parte, con afán casi antropológico y tendencia determinista, Sarmiento hace una semblanza de los rasgos físicos de su patria: "El mal que aqueja a la Argentina es su extensión, y la clase de vida que ella genera". Asimismo, encuentra y analiza las causas de su atraso: su naturaleza salvaje, el primitivismo de los gauchos y la ociosidad de los criollos. Por ello propone en su "proyecto civilizador" repoblar el país con razas europeas, fuertes y trabajadoras, así como propiciar la inmigración de italianos, tan amantes de trabajar la tierra, justamente lo que la Argentina necesita para el desarrollo de su agricultura. También señala, como consecuencias de las guerras de independencia, el despoblamiento de las ciudades y el retroceso de la civilización.Sin embargo, al margen de estas ideas que defiende Sarmiento, acertadas o no, su descripción minuciosa de vida y tipos humanos del campo argentino, así como del paisaje, deja ver cómo, aun a su pesar, se siente atraído por esos hombres obligados a sobrevivir en condiciones mucho más difíciles que las de los europeos a quienes admira.El talento literario de Sarmiento se pone de manifiesto, por ejemplo, en las páginas donde describe las figuras del rastreador, el baquiano, el gaucho malo, el cantor, y la pulpería.En la simplicidad de su estilo, estos cuadros son semblanzas escritas por un verdadero artista, donde no falta el tono emotivo de la evocación.Los nueve capítulos de la segunda parte contienen la vida de Facundo Quiroga, apodado el Tigre de los Llanos, célebre caudillo y gaucho bárbaro que había abrazado* el partido de los federales, para convertirse luego en el tirano sanguinario de San Juan y, más tarde, ser gobernador de Buenos Aires, de quien el mismo Rosas, luego de su triunfo, se deshizo sin escrúpulos; todo lo cual sirve a Sarmiento para ilustrar el empuje de la barbarie en la Argentina, el reinado de los instintos sanguinarios y de las feroces pasiones políticas.Quiroga aparece dibujado con trazos enérgicos que pintan eficazmente su índole bárbara; también se evocan y describen otras figuras (el fraile guerrillero Félix Aldao y el Chacho Peñaloza, por ejemplo) representativas de esa cruenta guerra civil que duró treinta años, fomentada por la sed de dominio. Sin embargo, a pesar de que el biografiado es Quiroga, el personaje en la mira de Sarmiento es Rosas. La muerte del Tire de los Llanos en una trampa planeada por el mismo asesino y tendida en Barranca Yaco, acarrea sus consecuencias pues, eliminado Quiroga, los federales comandados por el asesino, ya en el poder, gobiernan el país con tiranía. Por lo tanto, parece decir Sarmiento, muerto Facundo es necesario derribar también a Rosas, otra encarnación de la realidad bárbara, más dañina aún, puesto que se trata de una barbarie refinada.La idea de un gobierno unitario futuro, en la tercera parte de la obra, cierra el libro. Sarmiento especula sobre el porvenir político de la Argentina y de su pueblo diciéndonos cómo, para él, en la vida de Facundo Quiroga pueden reconocerse las fuerzas fundamentales del ser argentino: la barbarie y la civilización en lucha permanente.Facundo se escribió con objeto de hacer un análisis de la historia de Argentina, determinada —según Sarmiento— por la geografía de aquel país, y de las condiciones y acontecimientos que propiciaron la barbarie, como elementos que frenan el progreso y la civilización.Este escrito posee abundantes digresiones sociológicas, históricas, folklóricas y psicológicas, con un grupo de tesis que Sarmiento trata de demostrar, mas todo ello integrado al aspecto biográfico del general Juan Facundo Quiroga.El autor presenta los vicios y problemas que en esa época aquejaban a su país y, a la vez, esboza posibles soluciones. Por ello, atendiendo a sus propósitos iníciales, Facundo fue un arma de combate contra los enemigos de las ideas progresistas, aunque personales, de Sarmiento; de ahí el carácter panfletario que se adjudica a su contenido vehemente y contradictorio, pero escrito en páginas magistrales desde el punto de vista literario.El romanticismo de Sarmiento lo hace idealizar, como a muchos otros autores de su época, el papel regenerador de la educación europeizarte. Ésa debe ser, según él, la solución de los problemas y penurias padecidos por el sector ilustrado de los pueblos que sucumben bajo una tiranía tan sanguinaria como la de Rosas.Sin duda, Facundo es un libro polémico en cuanto a las ideas que sustenta; pero, literariamente, esto no lo demerita, al contrario, presta a la prosa de su autor una multiformidad sorprendente, puesSarmien­to pasa de la descripción sociológica a la biográfica y, de ésta, al ensayo político, integrando todo en una interesante y ágil trama narrativa. De aquí que, si Facundo es un texto fundamental de la literatura argentina por sus cualidades estéticas, también lo es por derecho propio dentro de la historia del pensamiento latinoamericano.


Valoración propia :
Facundo o Civilización y Barbarie, 1845; Trata sobre el caudillo riojano Facundo Quiroga y las diferencias entre los federales y unitarios. Es una descripción de la vida social y política del país que tiene alcances sociológicos e históricos, pues ofrece en él una explicación sociológica del país fundada en el conflicto entre la «civilización» y la «barbarie», personificadas respectivamente en los medios urbano y rural. Facundo es una de las obras más importantes sobre Quiroga y clave en la obra de Sarmiento.En mi opinión  Sarmiento le pide al historiador que intervenga sobre la realidad, que no sea impasible. La objetividad no existe, todos estamos atravesados por una serie de cuestiones y hay que tomar partido. La historia debe adoptar una forma retórica y cargarse de significación, de implicaciones ideológicas.